19.5.08

Misterio

Después de tocar en la Sala Zitarrosa, Gabo Ferro estaba contento. En el camarín, fuimos varios los que lo saludamos. A todos nos ofreció café, agua o Coca Cola. Ninguno aceptó, pero le desapareció la tapita de la botella del refresco del imperio, que a alguien habrá servido para completar una promoción y ganarse una botella de litro y medio gratis…

1 comentario:

andal13 dijo...

No creo en el determinismo ni en las causalidades/casualidades, ni en nada de eso, pero acabo de llegar a tu blog desde "Todo por la misma plata" y me encontré con esta anécdota... mientras estaba escuchando al propio Gabo Ferro de cuerpo presente...
Ya no se puede descreer en nada...